La hipertensión es la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida. De acuerdo con la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) esta patología afecta a más del 40% de las personas mayores de 25 años en todo el mundo, cobrándose 7,5 millones de vidas. Si no se trata, puede desencadenar infartos, embolias, fallos cardíacos y renales.
Una de las formas de prevenir la hipertensión es manteniendo una correcta salud bucodental. Y es que un análisis, que registró los exámenes médicos y dentales de más de 3.600 personas con tensión arterial alta, reveló que las personas con encías saludables tienen una tensión arterial más baja, en comparación con las que sí tienen enfermedades en la cavidad bucal. En realidad, las personas que padecían de periodontitis tenían un 20% menos de probabilidad de alcanzar niveles saludables de presión arterial, con respecto a los pacientes que tenían una buena salud bucal.
Además, la revista Hypertension, la cual pertenece a la Asociación Americana del Corazón, también ha realizado una investigación que señala que las personas con encías más saludables no sólo tienen una presión arterial más baja sino que también responden mejor a los medicamentos para disminuir la presión arterial.
Uno de los doctores que ha realizado el estudio, Davide Pietropaoli, doctorado en la Universidad de L´Aquila (Italia), ha explicado que «los médicos deberían prestar mucha atención a la salud oral de los pacientes, particularmente de aquellos que reciben tratamiento para la hipertensión, y urgimos a todos aquéllos con señales de enfermedad periodontal a buscar cuidado dental«.
Por ello, desde OralPrima te animamos a que, si sufres de hipertensión, acudas a tu odontólogo para realizarte las revisiones pertinentes y así, tomar las medidas necesarias para paliar los efectos adversos que repercuten en la presión arterial.
Asimismo, con el paso de los años, y al igual que el resto del cuerpo, la boca experimenta diversos cambios derivados del envejecimiento. Tanto en la estructura como en la función de la cavidad bucal. De ahí, la importancia de que las personas mayores tengan buenos hábitos de limpieza bucal.