El período navideño es tiempo de celebrar y de reunirse con familia, amigos y compañeros de trabajo para disfrutar de comidas y cenas. Sin embargo, es importante no descuidar la salud bucodental en estas fiestas, ya que algunos alimentos y bebidas típicos de estas fechas, si son consumidos en exceso, pueden perjudicar gravemente al estado de nuestra boca y dentadura.

Los dulces:

Polvorones, mazapanes o bombones son habituales en la mesa durante las Navidades; por no hablar de los turrones en sus diferentes modalidades (duro, blando, de chocolate…). Estos productos suelen contener una gran cantidad de azúcar, uno de los principales culpables de la aparición de caries.

Además, en el caso de los turrones, tenemos que tener especial cuidado, ya que el turrón duro puede dañar nuestra dentadura al morderlo, y si llevamos brackets o empastes, podrían deteriorarse. Por otro lado, el turrón blando puede provocar que se adhieran restos a nuestras piezas dentales siendo difícil el poder eliminarlos, aunque se realice un cepillado dental después de consumirlos.

Bebidas carbonatadas y con alcohol:

En estas fechas es habitual acompañar las comidas y brindar con bebidas carbonatadas y también alcohólicas como el champagne, cava, vino… Como ocurre con los dulces, la cantidad de azúcar que éstas contienen es muy elevado y su acidez puede ser perjudicial para nuestra dentadura, desgastando el esmalte de nuestras piezas.

Cafés e infusiones:

El frío hace que se dé un mayor consumo de café, té e infusiones para entrar en calor en esta época del año. El problema es que se tiende a endulzar este tipo de bebidas con azúcar, y pueden ser perjudiciales para nuestra salud oral.

Mariscos:

Algunos tipos de marisco, al igual que el turrón duro, tienen una dureza que puede provocar fracturas y daños en nuestras piezas dentales a la hora de morder y masticar, por lo que también hay que tener especial cuidado al consumirlo.

Sin embargo, cuidar nuestra salud oral no tiene por qué estar reñido con disfrutar de las comidas y cenas en estas Navidades, siempre que se tenga en mente consumir estos alimentos y bebidas con moderación. Además, se puede optar por alternativas más saludables, como adquirir turrón y dulces con un alto porcentaje de cacao e intentar, en la medida de lo posible, no añadir azúcar al café e infusiones (o si es inevitable, que sea con algún edulcorante que no aporte tanto azúcar, como la estevia). En el caso de las bebidas carbonatadas y alcohólicas, es importante no abusar de ellas, e incluso reservarlas sólo para los brindis, e intentando acompañar las comidas con otras opciones menos perjudiciales para nuestra boca y dentadura.

Por supuesto, es esencial cepillar los dientes después de cada comida y lo más recomendable es realizar una visita al dentista después de las fiestas para revisar el estado de nuestra boca y dentadura tras los excesos en Navidad. Os recordamos que con el seguro dental OralPrima la consulta profesional es un servicio gratuito incluido en la póliza.